miércoles, enero 28, 2009

Un sere vivo notiene por que ser un humano o animal.Un ser vivo es el ser que que ama con locura , que tiene sueño y metas , que disfruta y sufre, que siente compación por los demas y que tiene amigos y vive por ellos.


Algunos humanos, y animales no son asi , no perciben estos sentimientos por lo cual , Repito: un ser vivo no es humano u animal es el ser que puede estar vivo por dentro
.

jueves, enero 22, 2009


Perdon por no haber escrito pero es que no he tenido tiempo ya que pronto sera el nuevo año chino y en vietnam lo festejan.

Me he dado cuante de algo , pero ya les contare mi historia mas adelante.
¿Que hay de nuevo en eso ojos que tanto habia soñado?¿Que hay de nuevo en el cielo que esta tan alegre y a la vez tan triste?


no es amor

Ma he dado cuenta de lo que tu me dijiste , lo que yo no queria oir , y a lo que me aferraba , era verdad . Antes pensaba que era amor , pero me doy cuenta de que yo no soy una persona que se enamora de otra persona sin personalidad y sin alma . He estado ciega todo este tiempo , sin querer darme cuenta de lo que tu hacias yo no lo puedo aprobar .Ahora les digo esto pero me a costado mucho darme cuenta , no saben cuanto, y les puedo asegurar una cosa , la menta domina ala materia.

lunes, enero 12, 2009

es increíble ver como pasan los años , como nos haces mayores . Es imperfecto decir ¨es nuestro año¨ya que la rutina es la misma , uno no cambia , ni la vida tiene otro
sentido...para el corazón no se cuenta los años , si no los momentos , en buenos y malos.
con esta frase que me parece que es una gran verdad os dejo..
La peor forma de echar de menos a alguien es estar a su lado , y saber que nunca sera tuyo.
consejo:(no tiene nada que ver con la frase)
Piensa en los demás, sobre todo en los que día tras día te enseñan lo que tienen dentro, el los no se merecen algo malo ya que lo único que hacen es quererte.

miércoles, enero 07, 2009

Es el premio del deseo....es como hacer una cadena de deseos, yo se lo otorgaré a ciertas personas que tendrán que dejarme escrito en mi blog su deseo para el año 2009.Vosotros teneis que hacer exactamente lo mismo con la gente a la que se lo deis.Yo se lo entrego a:
- Lyra* de http://unapersonasoloparami.blogspot.com/
- bel_228 de http://vampigirl4ever.blogspot.com/
- Marina de http://mipropiomundillo.blogspot.com/-
goth_kitty de http://thegothkittyblog.blogspot.com/-
*TaTi de http://tatis1995.blogspot.com/
- Artemisa de http://tu-mejor-ayuda.blogspot.com/
- LadyC de http://myartshit.blogspot.com/
- Atenea de http://atenea-mi-viaje.blogspot.com/
- The Angles de http://wwwpao-chan.blogspot.com/
gracias por darme el premio

sábado, enero 03, 2009

amor asesino

Nunca podrá decirse que la infeliz Eva omitió ningún medio lícito de zafarse de aquel tunantuelo de Amor, que la perseguía sin dejarle punto de reposo.
Empezó poniendo tierra en medio, viajando para romper el hechizo que sujeta al alma a los lugares donde por primera vez se nos aparece el Amor. Precaución inútil, tiempo perdido; pues el pícaro rapaz se subió a la zaga del coche, se agazapó bajo los asientos del tren, más adelante se deslizó en el saquillo de mano, y por último en los bolsillos de la viajera. En cada punto donde Eva se detenía, sacaba el Amor su cabecita maliciosa y le decía con sonrisa picaresca y confidencial: «No me separo de ti. Vamos juntos.»
Entonces Eva, que no se dormía, mandó construir altísima torre bien resguardada con cubos, bastiones, fosos y contrafosos, defendida por guardias veteranos, y con rastrillos y macizas puertas chapeadas y claveteadas de hierro, cerradas día y noche. Pero al abrir la ventana, un anochecer que se asomó agobiada de tedio a mirar el campo y a gozar la apacible y melancólica luz de la luna saliente, el rapaz se coló en la estancia; y si bien le expulsó de ella y colocó rejas dobles, con agudos pinchos, y se encarceló voluntariamente, sólo consiguió Eva que el amor entrase por las hendiduras de la pared, por los canalones del tejado o por el agujero de la llave.
Furiosa, hizo tomar las grietas y calafatear los intersticios, creyéndose a salvo de atrevimientos y demasías; mas no contaba con lo ducho que es en tretas y picardihuelas el Amor. El muy maldito se disolvió en los átomos del aire, y envuelto en ellos se le metió en boca y pulmones, de modo que Eva se pasó el día respirándole, exaltada, loca, con una fiebre muy semejante a la que causa la atmósfera sobresaturada de oxígeno.
Ya fuera de tino, desesperando de poder tener a raya al malvado Amor, Eva comenzó a pensar en la manera de librarse de él definitivamente, a toda costa, sin reparar en medios ni detenerse en escrúpulos. Entre el Amor y Eva, la lucha era a muerte, y no importaba el cómo se vencía, sino sólo obtener la victoria.
Eva se conocía bien, no porque fuese muy reflexiva, sino porque poseía instinto sagaz y certero; y conociéndose, sabía que era capaz de engatusar con maulas y zalamerías al mismo diablo, que no al Amor, de suyo inflamable y fácil de seducir. Propúsose, pues, chasquear al Amor, y desembarazarse de él sobre seguro y traicioneramente, asesinándole.
Preparó sus redes y anzuelos, y poniendo en ellos cebo de flores y de miel dulcísima, atrajo al Amor haciéndole graciosos guiños y dirigiéndole sonrisas de embriagadora ternura y palabras entre graves y mimosas, en voz velada por la emoción, de notas más melodiosas que las del agua cuando se destrenza sobre guijas o cae suspirando en morisca fuente.
El Amor acudió volando, alegre, gentil, feliz, aturdido y confiado como niño, impetuoso y engreído como mancebo, plácido y sereno como varón vigoroso.
Eva le acogió en su regazo; acaricióle con felina blandura; sirvióle golosinas; le arrulló para que se adormeciese tranquilo, y así que le vio calmarse recostando en su pecho la cabeza, se preparó a estrangularle, apretándole la garganta con rabia y brío.
Un sentimiento de pena y lástima la contuvo, sin embargo, breves instantes. ¡Estaba tan lindo, tan divinamente hermoso el condenado Amor aquel! Sobre sus mejillas de nácar, palidecidas por la felicidad, caía una lluvia de rizos de oro, finos como las mismas hebras de la luz; y de su boca purpúrea, risueña aún, de entre la doble sarta de piñones mondados de sus dientes, salía un soplo aromático, igual y puro. Sus azules pupilas, entreabiertas, húmedas, conservaban la languidez dichosa de los últimos instantes; y plegadas sobre su cuerpo de helénicas proporciones, sus alas color de rosa parecían pétalos arrancados. Eva notó ganas de llorar...
No había remedio; tenía que asesinarle si quería vivir digna, respetada, libre..., no cerrando los ojos por no ver al muchacho, apretó las manos enérgicamente, largo, largo tiempo, horrorizada del estertor que oía, del quejido sordo y lúgubre exhalado por el Amor agonizante.
Al fin, Eva soltó a la víctima y la contempló... El Amor ni respiraba ni se rebullía; estaba muerto, tan muerto como mi abuela.
Al punto mismo que se cercioraba de esto, la criminal percibió un dolor terrible, extraño, inexplicable, algo como una ola de sangre que ascendía a su cerebro, y como un aro de hierro que oprimía gradualmente su pecho, asfixiándola. Comprendió lo que sucedía...
El Amor a quien creía tener en brazos, estaba más adentro, en su mismo corazón, y Eva, al asesinarle, se había suicidado.